Los niños especiales son aquellos cuyas
dificultades o desventajas para aprender requieren ayuda adicional para
alcanzar su pleno desarrollo educativo. Tales dificultades pueden ir desde
disfunciones físicas, problemas de visión, audición o lenguaje, disfunción para
aprender (desventaja mental), dificultades emocionales o de conducta, o un
problema médico o de salud. Otros niños pueden tener dificultades más generales
con la lectura, escritura, lenguaje o matemáticas, por lo que requerirán una
ayuda extra. Las ayudas para atender las necesidades especiales de educación
pueden darse en escuelas integradas o en escuelas especiales.
Las dificultades de aprendizaje que
presentan ciertos alumnos durante el proceso educativo demandan de un apoyo y
atención focalizada por parte del educador o especialista. Institucionalmente
la diversidad estará orientada a la valoración y aceptación de todos los
alumnos y al reconocimiento de que todos pueden aprender desde sus diferencias
y la diversidad social. Reconociendo que las prácticas áulicas son complejas,
cargadas de obstáculos que se acentúan en las relaciones ínter e
intrainstitucionales.